viernes, 14 de mayo de 2010

La silla de mimbre (Teresa Palazzo Conti)

Sentada
en un
cuadrante
remoto de la casa,
se sostiene la silla
como última invitada.

Hoy cuelgan sus harapos
los domingos
y gozan
las polillas cavernas

Una araña
ha tejido su aurora
de una punta a la otra,
y la ruina deambula
con su capa preñada.

De pie frente a los zócalos,
atiende comensales
que esgrimen voz de nadie.

Sobre la carne viva
de la memoria,
estampa algunos nombres.

2 comentarios:

HOJAS CAIDAS dijo...

He llgado a tu Blog y ha sido un placer leer a tan variados autores, buen Blog...felicidades.

Un abrazo

verso y palabra dijo...

Gracias por tu visita y tus palabras

un abrazo