jueves, 15 de mayo de 2014

Dicen que estoy loca (Mar Blanco)

Dicen que estoy loca
porque miro a los ojos.
Porque me gusta
besar sin tregua.
Porque escribo libertad
y abro la puerta.
Porque muestro la otra mejilla,
y se me olvida odiar.
Pero yo no tengo ningún mérito...
porque querer sale solo.
Sin esfuerzo.
Dicen que estoy loca
porque vaciarme el amor,
como se expande el vaho,
es la única forma,
que yo entiendo
de llenar el mundo. 

 Mar Blanco

domingo, 11 de mayo de 2014

Tengo océanos (Eva García Madueño)

Tengo océanos de palabras abrazadas a mi pecho,


ríos de versos susurrando entre los pliegues de mi piel,


caricias dormidas bajo el murmullo de las vocales que


saltaban desde el borde de tus labios y se enredaban con


las consonantes que se escurrían de mis comisuras.


Cuidado con las palabras, pueden llegar a ser peligrosas,


se adhieren al corazón y pueden provocar exceso de


sentimientos, de esos que bombean ríos de tinta viva,


pueden, después de todo, transformarse en poesía.





Eva García 

miércoles, 7 de mayo de 2014

Escóndeme en ti (Susana Násera)


Escóndeme en ti


Escóndeme en los colores del atardecer, dejando fluir respiraciones por los resquicios de luz. Embriagándome con el perfume de piel, sesgando sueños con tu boca, imaginando el firmamento en mi silencio.

Escóndeme -como un secreto- entre tus brazos, ocultándome en la insolencia de los cristales rotos, meciendo mi nombre en los suspiros de la lluvia, desnudándonos como torrentes de un deseo carnal.

Escóndeme en la penumbra, desbaratando con tus labios la serenidad de mi vientre, despertando anhelos en las horas lentas de esta primavera, que espera.
 
Susana Násera


domingo, 4 de mayo de 2014

Partida (María Angustias Moreno Barrios)

Por más flores que me regales,
por más piropos que al oido me digas,
no habrá momentos más hermosos,
como el día de tu partida.

Mª Angustias Moreno Barrios

jueves, 1 de mayo de 2014

Retrato (Luís Miguel Rabanal)

Su boca era oscura.
Su alma una guarida extensa
de vencejos.
Sus manos conseguían aquello
que rogaba con martirios.
Su vulva fue de espuma
más azul que medianoche.
Su pelo cuando llovía...
se llenaba de ángeles,
de ciclistas terribles
al final de cada año.
Su edad era un niño
que lloraba y lloraba.